¿Dónde quieres ir hoy?
Sube a tu moto y disfruta de magníficas rutas visitando "Pueblo a Pueblo" la provincia de Guadalajara -España-
Sube a tu moto y disfruta de magníficas rutas visitando "Pueblo a Pueblo" la provincia de Guadalajara -España-
Tras un día como el de ayer, inevitablemente hoy nos lo hemos tomado con muuuucha calma. Sin madrugar demasiado, aparecemos por el desayuno dispuestos a “repostar” nuestros cuerpos y lo hacemos pausadamente pero sin perder ripio. Salimos al parking a preparar las motos y allí seguía esperándonos una legión de mosquitos asesinos. “…Yo me voy pa’ dentro otra vez…”
Cuesta trabajo hoy arrancar pero hemos de hacerlo así que… ¡En marcha!
Por vez primera, tras 15 días de buscar el norte, ahora nuestro rumbo es hacia el sur. “…We go home…”
Tardamos poco tiempo en darnos cuenta que el itinerario que nos espera no es precisamente el más preciado de cualquier motero, puesto que la monotonía se apodera de nosotros. Las interminables rectas que se suceden a través de los inmensos bosques, primero noruegos y después finlandeses, acaban con el más pintado. Por si eso fuera poco, cientos de radares nos vigilan cada pocos kilómetros y además, los límites de velocidad son extremadamente bajos para el tipo de vía por la que circulamos. ¡Y nos quejamos de España!
Aburridos de rodar en estas circunstancias, aparece ante nosotros la frontera de Noruega con Finlandia delimitada por el rio Anarjåkka y nos apetece detenernos a poner nuestro sello de paso y a inmortalizar el momento. Nos echamos unas risas con las fotos y volvemos de nuevo al “trabajo”.
Tras unos cuantos kilómetros más, llagamos al cruce de la 92 con la E-75, en la cual se encuentra el famoso cartel, innumerables veces fotografiado por los miembros del foro, aunque esta vez los que posamos, en lugar de estar abrigados al máximo, estamos en manga corta, ¡qué suerte! jeje…
Seguimos adelante un buen trecho y de repente… ¡¡¡Mira Pere, dos curvas!!!, -comentamos por los intercomunicadores- ¡Esto hay que fotografiarlo!
Dicho y hecho. Aprovechamos para estirar las piernas y hacemos una foto a dos de las pocas curvas enlazadas de la ruta de hoy. En honor a la verdad, hay que decir que los bosques finlandeses que estamos atravesando son increíblemente bellos y enormes pero lo monótono de la carretera les quita cierto valor motociclista. Y lo peor es que parece que no va a ser el último día así. Ya veremos…
Como la mayoría de las jornadas, nos detenemos a comer en unos bancos de madera, esta vez en lugar de hacerlo en un merendero en ruta, lo hacemos junto a una gasolinera a las afueras de una pequeña población, cuando de pronto, una sinfonía de cláxones, rompe el silencio. ¿Qué pasará?…Levantamos la vista y aparece una manada de renos que se han apoderado de la carretera, invadiendo la calzada e impidiendo completamente la circulación.
Los conductores autóctonos, saben cómo han de hacer para que se aparten y dejen paso, pero aún así, los renos van a su aire y, si les apetece se apartan y si no, no. Al fin de al cabo, este es su territorio ¿no?
Rodando, rodando, rodando… llegamos por fin a Rovaniemi, nuestro destino de hoy, no sin antes detenernos en la línea que delimita el Círculo Polar Ártico por la parte de Finlandia, y que se encuentra nada más y nada menos que en complejo llamado “Napapiri” o Casa de Santa Claus. Nos tomamos un tiempo de descanso y visitamos el complejo, coincidiendo con un grupo de moteros españoles de Villarobledo, con los que charlamos un rato y comentamos alguna anécdota de nuestros respectivos viajes a Norddkapp.
Dejamos ya a Papá Nöel y una vez instalados en nuestro alojamiento, cogemos las motos de nuevo para acercarnos a cenar a la city, puesto que el apartamento queda un poco retirado hoy. Si nos descuidamos un poco, nos quedamos sin cenar y es que, una vez más, hay que prestar atención a los horarios de cierre por estos lares, que para nada se parecen a los nuestros.
Sin más, regresamos a lo que hoy será nuestro hogar por unas horas para descansar.
“…Bueno, por hoy ya hemos tenido suficiente ¿no crees amigo?…”
“…Si… poca cosa más queda por hacer hoy, hasta mañana, descansa mucho…”
«… Si… tu también…»